miércoles, 2 de septiembre de 2015

Pozo

Pescar en el desierto
al asomarme
al pozo de tu ombligo
en esta tierra, blanca, 
que no conoce lluvia ni alimento.
Y aunque el paisaje es calmo
y descargo mis piernas 
con soltura
en el largo vacío de la poza,
no hay organismo humano 
que resista 
siete días sin agua.

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